Recordarás de nuestra entrada anterior que la conexión emocional con tu mercado es básico, y hace un par de semanas te hablamos sobre diversificar y balancear la publicidad física y por internet.

Lo que quizá no te quedó claro es: ¿Qué sigue después? La verdad es que eso depende enteramente de tu equipo y sus metas, pero a continuación te damos algunos tips que te servirán en cualquier proyecto publicitario.

1.-No se trata de jugar bien, se trata de cambiar el juego.

La publicidad es un área sumamente repetitiva. Esto no es necesariamente malo, solo quiere decir que algunas estrategias funcionan muy bien. Por lo tanto, muchas empresas prefieren repetir esas cuantas estrategias que ya están comprobadas. Suena lógico, ¿no? La cosa es que este juego de repetición va perdiendo fuerza conforme el público se acostumbra a verlo. Por eso es tan importante innovar en tu forma de hacer publicidad; después de todo, el primero en encontrar oro siempre es el que se lleva más.

 

2.-La publicidad no se trata de ti, se trata de tu cliente

El marketing efectivo jamás se enfoca en vender a toda costa y gritar por todos lados que TU producto y TU empresa es lo mejor en la industria; una campaña verdaderamente exitosa hace sentir a tu consumidor como un individuo, con experiencias únicas que tú entiendes y cuya lealtad es en verdad invaluable. Recuerda que en este juego, ganar no es que te compren una vez, sino que vuelvan a la próxima.

 

3.-El consumidor no es un número, un nombre de usuario o un perfil más.

Aún cuando tengas la base de datos más completa de tus clientes potenciales, no olvides en ningún momento que se trata de seres humanos; cambiantes, complejos, con sensibilidades propias y sobre todo, con personalidades únicas. No permitas que tu publicidad sea tan rígida como tus números, deja “espacio para respirar” y ten sentido del humor. Tu meta es que las personas vean que tu marca está hecha por personas como ellos, y así ganar su simpatía.

 

4.-Existe una gran diferencia entre decir lo que tus clientes quieren escuchar y lo que necesitas.

El cliente potencial está al centro de tu estrategia, y como mencionamos arriba, es importante enfocarte en sus necesidades, pero sin mimarlos. Cuando defines tu discurso publicitario, la idea no es decir cosas que a tus clientes le gusten solo por que sí, sino expresar las cosas que necesitas decir de una forma que a ellos les parezca atractiva y novedosa. De esa forma, sin importar la plataforma en que trabajes, tendrás asegurada su atención, y tu mensaje no se sentirá vacío y deshonesto.

 

5.-Nunca olvides tu sentido común.

A fin de cuentas, la mercadotecnia y la publicidad son disciplinas que buscan un resultado muy simple a través de procesos muy complejos. Queremos que el consumidor compre y nos recuerde, y por eso es bueno ponerte en sus zapatos; ve tu estrategia con ojos nuevos, cada paso, y pregúntate si lo que propones funcionaría si estuvieras del otro lado de la ecuación. Si tienes que pensarlo demasiado, cambia tu estrategia.

 

Lo mejor de esto 5 consejos es que te pueden facilitar mucho el trabajo de diseñar el contenido de tu campaña sin perder de vista tu verdadero objetivo; llegar a las personas y hacerlas ver un lado diferente al de las demás compañías. Si tú ya tienes una idea de oro para atraer todas las miradas, ¿por qué no cotizar con Vimedios y llevarla al público?